Sin lugar a dudas, una de las mayores preocupaciones de los padres en lo que respecta a Internet, es saber por dónde puedan estar navegando sus hijos y el contenido que podrían estar consumiendo.
De hecho, la mayoría de los padres se preocupan por la seguridad de sus hijos online, y si bien esperaríamos que fueran todos, es un porcentaje bastante alto acorde con los riesgos a los que se pueden enfrentar los menores en Internet.
La primera medida que deben implementar los padres con sus hijos es el diálogo. Más que impedir que los niños interactúen con la tecnología, es importante hacerles ver cuál es la forma adecuada de utilizarla.
Este diálogo franco y directo debe empezar en casa y continuar en la escuela, y debe acompañarse de algunas reglas como la ubicación del ordenador, la duración de las conexiones o los dispositivos que se pueden utilizar, entre algunas otras para que la experiencia sea sana.
Apoyándonos en la tecnología
Pero todas estas medidas se deben complementar con las medidas tecnológicas adecuadas. Y es en este punto donde aparecen las herramientas de control parental, las cuales permiten que los padres controlen o limiten el contenido que un menor puede ver en sus dispositivos.
Si bien hay herramientas desarrolladas exclusivamente con este propósito, es importante tener en cuenta que el control parental se establece desde la misma configuración de los dispositivos en los que realicen actividades los niños.
De esta manera, independientemente de si se utiliza Windows, Mac OS X, alguna distribución de Linux o sistemas operativos en móviles como iOS o Android, cada usuario que utilice el equipo debería tener su propio usuario con las configuraciones de seguridad adecuadas. En el caso de los más pequeños, se puede restringir desde la instalación de aplicaciones descargadas de Internet hasta configurar el uso de cierto tipo de programas.
Estas medidas de configuración se pueden complementar aplicando características por defecto en los navegadores web. Por ejemplo, en el caso de los perfiles de usuario de los más pequeños, que la página por defecto sea alguna como Bunis.org, un buscador seguro que aplica filtros sobre las búsquedas realizadas para mostrar contenido que no resulte ofensivo para los menores.
Utilizando herramientas de control parental
Todas las medidas anteriores se pueden complementar con el uso de una herramienta de control parental, que permitiría implementar los siguientes controles:
- Roles de usuario
Los padres pueden controlar y monitorizar el acceso a Internet de los menores configurando un rol para cada uno de los usuarios que utilizan los dispositivos. De este modo, se pueden personalizar distintos permisos de acceso a Internet, privilegios sobre archivos importantes e incluso la instalación de nuevo software como videojuegos.
- Restricción de acceso por categoría
Una de las características principales es que los padres puedan restringir el acceso a sitios de Internet añadiendo o quitando elementos de una lista de categorías web para cada rol. Es decir, se podría limitar el tráfico teniendo en consideración los contenidos de diferentes sitios.
Un claro ejemplo sería aplicar algunos filtros que afecten a los sitios de juegos online, pero que a su vez permitan a los niños un libre acceso a los buscadores permitidos para realizar sus tareas escolares.
- Bloqueo de páginas web
Es la capacidad para restringir el acceso a contenido inapropiado mediante el bloqueo de ciertas páginas web. Dependiendo del rol que se quiera proteger, se pueden restringir o permitir los accesos. En esta sección podríamos bloquear sitios de contenido violento o sexual, e incluso aquellos sitios que posean una baja reputación.
También es importante mencionar que en muchos casos esta funcionalidad permitirá el bloqueo de ventanas emergentes de sitios pornográficos o inadecuados, a los que muchas veces los niños llegan por error.
- Registro de actividad
Los padres pueden revisar la actividad que queda registrada con esta herramienta, como por ejemplo, las páginas que han sido bloqueadas o cuentas para las cuales han sido bloqueados ciertos sitios y por qué. Monitorizando los sitios registrados podremos generar un patrón de comportamiento del menor, con el fin de reforzar la educación en aquellos puntos clave que creamos convenientes para mejorar su protección en Internet.
- Control de aplicaciones y tiempo de uso
Con estas herramientas se puede decidir qué aplicaciones pueden ser utilizadas, cuándo y el tiempo máximo de uso. Así, se evita que los menores no estén demasiado tiempo conectados o jugando excesivamente con los dispositivos. Esta solución protegería de un uso excesivo de los dispositivos debido a ciertos juegos que pueden resultar adictivos, estableciendo un tiempo máximo de uso.
Medidas adicionales de seguridad
En este punto es muy importante el uso de una contraseña segura para evitar que las configuraciones de seguridad implementadas no se puedan alterar por un usuario diferente a los tutores del menor. Si bien para muchos padres el control parental solamente se usa para bloquear el acceso a Internet, lo más adecuado es apoyarse siempre en el diálogo y educación de los menores.
Estas aplicaciones de control parental deben utilizarse teniendo muy en cuenta el objetivo para el cual son utilizadas, y en esto va influir de forma importante la edad de los menores que van a utilizar los dispositivos para acceder a Internet. No es lo mismo tener estos controles en dispositivos que utilizan niños pequeños, para quienes el acceso a Internet se basa en jugar o consumir material visualmente atractivo, a tenerlos instalados en dispositivos utilizados por adolescentes, que intercambian información personal, conocen personas nuevas cada día e interaccionan con ellas.
La confianza entre padres e hijos es fundamental para establecer un vínculo que realmente puede ayudarlos a disfrutar de forma segura de Internet. Si este tipo de herramientas se utilizan para espiar las actividades de los menores o restringir de forma radical sus actividades, puede que se genere cierta incomodidad, así que siempre es mejor empezar por educar sobre el uso adecuado de los dispositivos e Internet.
El punto clave será conseguir que tomen consciencia de los riesgos y peligros que representaría un uso inadecuado de los dispositivos conectados a Internet, dejando bien claro que las herramientas de control parental están instaladas para su propia seguridad.
Josep Albors a partir de un artículo de Camilo Gutiérrez Amaya en WeLiveSecurity