No falla. Cuando una aplicación consigue un notable éxito en dispositivos móviles, siempre aparecen otras que intentan aprovechar la situación para hacer su agosto. En esta ocasión ha sido la esperada aparición en smartphones de todo un icono de los videojuegos, como es Mario, la usada para generar todo tipo de copias y aplicaciones que poco tienen que ver con la de Nintendo.
Crónica de un éxito anunciado
La expectación por este juego no paró de crecer desde que se anunció a mediados del pasado mes de noviembre dentro de un evento de Apple. No es de extrañar, pues, que cuando este juego estuvo disponible el pasado 15 de diciembre las descargas se contaran por millones, concretamente, más de 10 millones de descargas solo el día de su lanzamiento, un éxito solo equiparable al del otro juego revelación del año, Pokemon Go, y eso a pesar de que se ha lanzado solamente en dispositivos de Apple.
Sin embargo, como también era de esperar, los mercados de aplicaciones se han llenado de juego clónicos que quieren aprovecharse de la fama de Super Mario Run y del hecho de que aún no se encuentra disponible para dispositivos Android. Así pues, si realizamos una búsqueda en Google Play, veremos como nos aparecen resultados similares a los siguientes:
Muchas guías pero también juegos clónicos como Super Plumber Run o Mario Run Jumper (esta última ya retirada) que copian la mecánica del juego o el protagonista. Obviamente, los creadores de estas aplicaciones buscan aprovecharse del éxito de otros para hacer negocio, más aun cuando este juego no está disponible para los cientos de millones de dispositivos Android.
¿Qué puede salir mal?
Muchos usuarios podrían pensar que la aparición de este tipo de aplicaciones no suponen un mayor problema, puesto que satisfacen su necesidad de jugar a un sucedáneo del juego real, además de forma gratuita. Sin embargo, hemos de tener en cuenta que muchos de estos juegos se financian con publicidad y esta ha de estar perfectamente controlada por los desarrolladores para evitar que se muestren contenidos inadecuados para los más pequeños de la casa o enlaces a webs en los que se juegue con dinero de verdad.
En la peor de las situaciones, un anuncio creado por delincuentes podría colarse en estos servicios de publicidad dentro del juego y descargar malware en el dispositivo del usuario. Es lo que se conoce como malvertising, un vector de ataque que se está usando cada vez más para conseguir infectar a un elevado número de usuarios.
Además, que una versión de este tipo de juegos clónicos sea aparentemente inofensiva no significa que el resto también lo sea. Ya analizamos hace meses varios ejemplos de juegos en Google Play que empezaron a incorporar funcionalidades maliciosas conforme lanzaban nuevas versiones al mercado. Nada impide pues que esta historia se repita con una copia de un juego de éxito.
Conclusión
Sabemos que muchos usuarios están impacientes por poder jugar a Super Mario Run en sus dispositivos Android, pero de momento la mejor opción es esperar a que Nintendo se decida a publicar el juego en esta plataforma. Hasta entonces, mucho cuidado con las aplicaciones que nos prometen una experiencia similar, cuando no idéntica, porque el resultado puede ser mucho peor que tener que esperar un poco más de tiempo.
A todo esto, felicidades a los que ya estén disfrutando de este clásico remodelado y adaptado a smartphone y recordad que la princesa siempre está en otro castillo 😉