Parece mentira, pero muchas veces los más pequeños de la casa, con su curiosidad innata por todo lo nuevo y con la ausencia de miedo a probar, nos sorprenden. Y en este caso, esta noticia sí me ha sorprendido, y mucho.
Y es que leemos en alt1040 que Kristoffer Von Hassel, un niño de cinco años, ha descubierto un agujero de seguridad en la consola Xbox One gracias a las ganas que tenía de saltarse el control parental que su padre le había puesto y que no le permitía jugar a los juegos de acción que le gustaba.
Así que, ni corto ni perezoso, una vez que el niño introducía la contraseña incorrecta en la pantalla de inicio de sesión de la cuenta de Xbox Live de su padre, el sistema automáticamente le llevaba a la pantalla de «Olvidó su contraseña». Solo necesitó darle muchas veces a la tecla de espacio y después a «Enter» para saltarse el bloqueo y disfrutar como un enano, ¡nunca mejor dicho!
Cuando su padre lo averiguó, le preguntó cómo lo hacía. Y al enterarse, contactó con Microsoft para hacerles saber el problema, ya que se trataba, tal y como ha asumido el propio Microsoft, de un fallo de seguridad que confiamos en que hayan solventado.
Kristoffer no podrá jugar a Call of Duty de momento, pero ha sido añadido a la lista de «investigadores de seguridad» de Xbox, y lo han recompensado con 4 videojuegos, un año de suscripción a Xbox Live y 50 dólares para gastar en la tienda de juegos y aplicaciones de Xbox.
¡Bien por los pequeños!