Siguen los cambios en la privacidad de Facebook mientras su consulta popular fracasa

Hace relativamente poco, Facebook nos sorprendió a todos con una encuesta online a sus usuarios sobre su política de privacidad, cuyo período de votación ya ha terminado. La votación se llevó a cabo utilizando la propia red social en lo que parece ser más un golpe de efecto de relaciones públicas que otra cosa. Si lo piensas bien, tiene su sentido: si abren una votación popular para que la gente opine, no lo hace (o, por lo menos, no en la cantidad que esperaban) y luego alguien se queja, Facebook siempre tendrá a mano el recurso de alegar que han preguntado abiertamente.

Esto me recuerda la conocida frase de «¿Susto o Muerte?», porque elijas lo que elijas siempre te dirán: «Ah… haber elegido susto» ;-).

Bueno, la realidad es que el índice de participación ha sido muy bajo, ya que han sido solo algo más de medio millón de personas las que han participado y se han molestado en votar en Facebook si estaban a favor o no de las nuevas normas de privacidad que la red social ya está implementando. Según el propio Facebook:

Un auditor externo ha revisado y ha confirmado los resultados finales. De aproximadamente 668.872 personas que han votado, 589.141 han recomendado que mantengamos nuestras DDR y Política de uso de datos. Hemos llevado a cabo esfuerzos considerables para informar a nuestros usuarios y animarles a votar, tanto a través de mensajes de correo electrónico como en su sección de noticias. A pesar de estos esfuerzos y de la divulgación en los medios de comunicación, ha participado menos del uno por ciento de nuestra comunidad de más de mil millones de usuarios. Tal como se estipula en ambas políticas, los resultados tienen carácter consultivo a menos que vote el 30% de los usuarios.

Es decir, que ahora Facebook está legitimado a hacer cualquier tipo de cambio, porque no ha conseguido que el 30% de su «población» se pronuncie, lo que es algo así como 300 millones de usuarios… La jugada es muy buena, todo hay que decirlo.

Entre las cosas que se estaban preguntando figuran temas como el cruce de datos con los usuarios de Instagram, empresa comprada por Facebook hace unos meses, la posibilidad de que la red social envíe al usuario los contenidos que crea que le van a interesar, y acabar con este tipo de votaciones, que implantó en 2009.

Según hemos leído en varios medios, la percepción general es que a la gente, en realidad, no le importa su privacidad. Y aquí es donde disentimos profundamente: a la gente sí le importa su privacidad, pero es realmente difícil no perderse en el mar de información diaria en el que nos vemos inmersos, en la complicada jerga legal escondida entre larguísimas políticas que nadie lee y que acepta y en conocer las consecuencias reales de cada frase, sentencia o afirmación.

Pero a Facebook le da igual, porque ya tiene el arma que quería. Y de hecho, no han tardado en anunciar las nuevas funcionalidades relacionadas precisamente con su política de privacidad que en breve comenzaremos a ver en nuestros perfiles, aún a pesar de que tan solo 80.000 usuarios, un escaso 12%, se habían mostrado favorables a los cambios, frente al 88% de los votantes que se pronunciaron en contra de las medidas.

Por lo tanto, la red social ya ha presentado nuevas herramientas que ofrecen a los usuarios «mejores controles» de los contenidos publicados, entre ellas nuevos accesos directos para gestionar la configuración de privacidad y una función mejorada para solicitar la eliminación de fotografías. Los cambios comenzarán a aplicarse a partir de la semana próxima.

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Igualmente van a añadir una vía para solicitar la eliminación del etiquetado de fotos publicado por terceros, aunque, eso sí, su efectividad va a depender siempre de que dicho tercero quiera de verdad eliminar la etiqueta.

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La última modificación puede estar bien dependiendo de cómo se implemente, ya que permitiría a los usuarios elegir qué tipo de información quiere que se comparta con aplicaciones de terceros, dado que hasta ahora solo tenías dos opciones: o aceptar los términos impuestos por la aplicación incluyendo actividades de riesgo (como permitir el publicar en nuestro nombre o acceder a toda nuestra información personal) o no aceptarlos y, por lo tanto, no utilizar el app en cuestión.

Estaremos pendientes y os iremos contando más novedades ;-). Feliz jueves!

Yolanda Ruiz Hervás

 

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