Que los estafadores del amor no arruinen tu San Valentín

La celebración de fechas como San Valentín nos recuerda la importancia que siguen teniendo en nuestra sociedad las relaciones interpersonales, por mucho que estas hayan evolucionado y se hayan trasladado, parcialmente, al plano online. Por desgracia, allá donde existan víctimas potenciales acudirán también los delincuentes, y eso es algo con lo que debemos contar para evitar caer en las trampas que nos preparan, aprendiendo primero a identificarlas y aplicando algunos consejos que nos librarán de pasar un mal rato y de posibles pérdidas económicas.

Desde hace años venimos observando que las aplicaciones de ligue están teniendo un peso cada vez mayor a la hora de encontrar pareja. Aplicaciones como Tinder ya forman parte de nuestro día a día y están perfectamente aceptadas cuando se trata de buscar pareja para un ligue ocasional o algo más serio.

Y, a pesar de que estas apps tienen sus ventajas y permiten compartir con facilidad con otras personas nuestros intereses amorosos, también representan una gran oportunidad para ciberdelincuentes de todo el mundo para aprovecharse de solteros desesperados por encontrar a su media naranja, especialmente durante estas fechas.

Lamentablemente, no son pocos los usuarios que han caído víctimas de estafadores del amor, ya sea mediante el uso de apps de ligue, redes sociales o tras recibir un email. Hace unas semanas nos consternamos por el triple crimen de Morata de Tajuña, cuyo origen fue, precisamente, una estafa amorosa, y aunque desenlaces tan trágicos como ese no suelen ser lo habitual, sí que pueden suponer la pérdida de importantes cantidades de dinero a las víctimas engañadas, independientemente de su procedencia, género y edad.

Si nos paramos a revisar el funcionamiento de estas estafas, observamos que no han cambiado mucho desde que se originaron, utilizando técnicas como la de hacerse pasar por una celebridad, un militar en apuros o simplemente una atractiva mujer de algún país del este de Europa que ha quedado encandilada al ver nuestra fotografía. La diferencia es que ahora estas estafas tienen un alcance mayor gracias a las redes sociales y apps de ligue, los delincuentes han perfeccionado sus técnicas y el uso de la inteligencia artificial en este tipo de estafas va a suponer un serio problema si no sabemos identificarlas.

Precisamente, para ayudar a evitar caer en este tipo de estafas, procedemos a enumerarlas y a ofrecer consejos que nos ayuden a evitarlas.

1.- Utilización de identidades falsas

Sin duda, una de las tácticas más utilizadas por los estafadores del amor consiste en crearse perfiles falsos en aplicaciones de ligue para tratar de hacer creer a sus víctimas que son otra persona. Estos delincuentes solían utilizar fotos obtenidas de perfiles de otras personas o fotos de stock, pero con la facilidad actual para generar imágenes de personas con la ayuda de inteligencia artificial, los delincuentes tienen a su disposición una cantidad ilimitada de imágenes para crear todos los perfiles falsos que quieran.

Este perfil falso es utilizado por los estafadores para conectar con otros usuarios y ganarse su confianza poco a poco para, una vez que el delincuente considere que es el momento adecuado, inventarse alguna excusa o historia creíble que desemboque en la solicitud de una cantidad de dinero a la víctima. En este punto, si la víctima ha caído en las redes del estafador, es probable que acceda a realizar una transferencia de dinero, le compre regalos de cierto valor o incluso llegue a reservar algún billete de avión con la esperanza de encontrarse próximamente con su media naranja.

La principal evolución de esta amenaza a lo largo de los últimos años ha sido que algunos delincuentes eligen muy bien a sus víctimas, investigando acerca de su vida, hobbies y hábitos, gracias a las publicaciones que suelen hacer en redes sociales. De esta forma, saben muy bien cómo ganarse su confianza y las probabilidades de que la estafa tenga éxito aumentan considerablemente.

Protegernos de este tipo de estafadores puede llegar a ser complicado, especialmente si previamente han realizado la labor de investigarnos y, por nuestra parte, andamos con la guardia baja, deseosos de encontrar a nuestra pareja ideal. Lo importante en estos casos es no desvelar demasiada información personal, realizar preguntas a esta persona para tratar de pillar alguna incongruencia (lugar donde vive, familia, aficiones, etc.) y, sobre todo, desconfiar cuando nos solicite algún tipo de favor personal que nos suponga un desembolso de dinero.

2.- Mensajes de phishing y distribución de malware

Las aplicaciones de ligue pueden representar una puerta de entrada para ataques de phishing y la distribución de códigos maliciosos. Para un delincuente es muy fácil generar muchos perfiles y usarlos para publicar mensajes que atraigan a las posibles víctimas, mensajes que pueden incluir enlaces o incluso ficheros adjuntos pensados para que las víctimas pulsen sobre ellos.

En caso de descargar un archivo malicioso y ejecutarlo, los delincuentes podrían llegar a acceder a cualquier tipo de información personal almacenada en el sistema de la víctima, lo que incrementa notablemente las probabilidades de que se produzca un robo de identidad o de datos relacionados con tarjetas de crédito.

Es fundamental que, en los primeros compases de una relación de este tipo, no se pulse sobre ningún enlace o se abra ningún fichero que se nos envíe. Incluso aunque parezca un enlace inofensivo relacionado con los mejores restaurantes donde tener una cena romántica o sobre un tema de nuestro interés, ya que es fácil preparar un enlace que, a primera vista, parezca legítimo.

3.- Recopilación de información privada y chantaje

Las aplicaciones de ligue (y cualquier red social, en general) suelen almacenar una cantidad importante de información personal, lo que las hace sumamente atractivas para todo tipo de delincuentes, incluyendo los estafadores del amor. Se pueden utilizar técnicas de minería de datos para extraer información sensible de los usuarios mientras que las fugas y robos de información desde estas plataformas no son algo raro, por desgracia.

Con esta información real y, en ocasiones, con información como vídeos o fotografías inexistentes, los delincuentes pueden tratar de extorsionarnos. Hasta el momento, las campañas de extorsión suelen apelar al miedo de la víctima a que se difunda entre sus amigos, familiares y compañeros de trabajo fotografías o vídeos comprometidos, aunque estos no existan en realidad.

Sin embargo, con las capacidades actuales de la inteligencia artificial y las múltiples herramientas que se aprovechan de ella, no será nada raro que veamos próximamente campañas donde los delincuentes amenacen con difundir imágenes y vídeos comprometidos generados a partir de fotografías y grabaciones inofensivas que pueden haber recopilado de nuestros perfiles en redes sociales, apps de ligue o de otras fuentes públicas.

Para luchar contra este tipo de chantajes es importante asegurarse de compartir información relacionada con nuestra imagen en redes sociales solamente con aquellas personas de confianza. En las aplicaciones de ligue los usuarios suelen ser más propensos a proporcionar imágenes suyas, pero esto no significa que debamos enviar todo tipo de fotografías y vídeos al primero o primera que nos las solicite. Por supuesto, nada de compartir imágenes de marcado contenido sexual con personas que no sean de nuestra total y absoluta confianza y, aun así, mucho cuidado con este tipo de material.

4.- Amenazas basadas en la geolocalización

Muchas aplicaciones de ligue utilizan servicios basados en la geolocalización para poder conectar más fácilmente con otras personas que estén en busca de pareja cercanos a nosotros. Aunque esta característica facilita la búsqueda de pareja en ubicaciones cercanas a donde nos encontramos, también puede ser aprovechada por delincuentes para seguir y seleccionar usuarios concretos, lo que nos lleva a amenazas que traspasan del mundo online al mundo real.

Si bien desactivar la geolocalización es algo que muchos usuarios no contemplan para evitar que sus posibles parejas sean de algún lugar demasiado lejos, sí que podemos limitar el alcance haciendo que nuestra ubicación solo permanezca disponible mientras usamos activamente la aplicación.

Conclusión

Mientras la popularidad de las aplicaciones de citas continúa creciendo, también lo hace el riesgo de ser un objetivo de todo tipo de estafas y ciberamenazas. Por ese motivo es importante estar atentos a las señales que nos pueden ayudar a identificar a un posible delincuente escondido detrás de un perfil interesante y ser desconfiado para que la búsqueda de nuestra media naranja no se convierta en una pesadilla.

Josep Albors

Los MSP ponen fin al «juego del escondite» en sus entornos con ESET Cloud Office Security